viernes, 18 de marzo de 2022

Descubre como la domesticación moldeo el cerebro de los perros

 Un nueva investigación basada en el estudio de 33 razas de perro ha concluido que la domesticación afectó significativamente a la forma del cerebro de estos animales. La selección artificial modeló distintas áreas y redes neuronales, lo cual acabó afectando al comportamiento de los perros.


Siglos de evolución han convertido al mejor amigo del hombre en uno de los animales con más razas del planeta, algo que tiene mérito, habida cuenta que la mayor parte de las entre 350 y 400 conocidas cuentan con menos de dos siglos de antigüedad. Durante años, los criadores de perros interfirieron en el proceso evolutivo de los canes, combinando especímenes con características diversas y seleccionando aquellas crías que mejor se adaptaban a los atributos que se querían potenciar. Por ejemplo: para conseguir un can capaz de acorralar a los tejones, se cree que cazadores alemanes de los siglos XVIII y XIX cruzaron sabuesos con Terriers, lo que acabó creando la raza Teckel.


Ahora sabemos que, según reza una nueva investigación científica basada en el estudio de escáneres cerebrales, a medida que el hombre fue domesticando nuevas razas, el cerebro de los perros también fue adaptándose. Los científicos han examinando la variación volumétrica de distintas regiones del cerebro de 62 canes (tanto machos como hembras) de 33 razas distingas para desvelar las variaciones anatómicas visibles. El objetivo: demostrar hasta qué punto la selección artificial ha afectado a la estructura cerebral de estos animales.


Los investigadores descubrieron una fuerte correlación entre estas variaciones volumétricas con los distintos comportamientos de los perros en función de su raza, con lo que concluyeron que estos cambios anatómicos tuvieron que producirse en las últimas ramas del árbol filogenético (esto es, durante la última de sus etapas evolutivas), presumiblemente como consecuencia de la domesticación. En concreto, se dieron cuenta de que las diferencias entre razas y comportamientos (como los que diferencia a los perros de presa y a los perros guardianes de los perros de compañía) coincidían con unos patrones neuronales perfectamente definidos en el cerebro, que, sin embargo, no tenían relación con otras variantes (como la forma del cráneo o el tamaño corporal).


El equipo científico, dirigido por la neuróloga especializada en evolución Erin E. Hecth, de la Universidad Harvard, descubrió, por ejemplo, que todos los perros de presa (como los que utiliza el ejército o la policía, o los destinados al control de alimañas) presentaban la misma variación en el cortex prefontal, un área asociada con la pertenencia al grupo y la interacción social. Otras razas presentaban rasgos característicos en función de las distintas fases del proceso de domesticación. Este era el caso de los Bulldogs, unos perros que fueron adiestrados inicialmente para controlar y guardar el ganado y que posteriormente se adaptaron para convertirse en mascotas domésticas. Su comportamiento, y con él su cerebro, combinaba las características de una y otra fase de domesticación.


Fuente National Geography 

Conoce cómo tu perro puede escucharte en medio del bullicio

 Según un nuevo estudio, los perros son capaces de detectar su nombre en un entorno ruidoso, con independencia de quién le esté llamando. Este descubrimiento podría ser útil para perros de asistencia o de rescate, obligados en ocasiones a trabajar en lugares con demasiado ruido.


Imagina que te han invitado a una fiesta en la que hay mucha gente. De repente centras tu atención en una conversación que te interesa, haciendo caso omiso al resto del ruido. Incluso es posible que en medio de todo ese ruido oigas tu nombre. En ese caso, tu interés se centrará de repente en quién y qué están diciendo de ti. A esa capacidad de focalizar nuestra atención auditiva en un estímulo particular mientras filtramos ruidos se le conoce como ‘efecto fiesta de cóctel’. Gracias a ello, podemos ‘sintonizar’ directamente con una voz en concreto y ‘desconectar’ del resto. Es lo que posibilita, por ejemplo, a un controlador aéreo discernir entre distintos estímulos, o a un camarero de un bar o un restaurante ruidoso centrar su atención en las comandas.


Esta capacidad ha sido ampliamente estudiada en humanos desde mediados del siglo XX, pero hasta la fecha nunca había sido probada en perros. Ahora, según un nuevo experimento realizado en la.Universidad de Maryland, en Estados Unidos, los cánidos también son capaces de detectar si alguien les llama por su nombre en mitad de un entorno bullicioso. Además, según estas investigaciones, pueden hacerlo con independencia de quién les esté llamando, lo que descarta la posibilidad de que los cánidos respondan al lenguaje corporal, el tono de voz u otras pistas de voces con las que estén familiarizados.


Una habilidad fantástica para perros rescatadores

Según dicho estudio, publicado recientemente en la publicación especializada Animal Cognition, esta habilidad es especialmente útil para aquellas personas que trabajan con perros de asistencia, pues en situaciones urgentes, especialmente en entornos ruidosos, estos animales pueden necesitar órdenes de personal más allá de sus dueños o cuidadores.

Para realizar el estudio, la científica cognitiva Amritha Mallikarjun y su equipo reclutaron a perros de varias razas, incluidas mascotas y cánidos de asistencia, de terapia o de rescate, junto con sus dueños. Cada ejemplar fue colocado junto a su dueño en una cabina de pruebas con dos altavoces, de modo que cada uno tuviera que girar la cabeza 90 grados para mirar a cada altavoz cada vez que su dueño decía su nombre. Después repitieron el proceso con la voz de una mujer desconocida, que repetía el nombre de ese perro o de otro con el mismo patrón y acentuación. Combinaron las grabaciones acompañadas de ruido de fondo, como el de una cafetería atestada, en tres niveles de volumen distintos.


Los resultados mostraron que los perros prestaban más atención cuando se les decía su nombre, con independencia de quién lo dijera, discriminando esa información de todo el ruido ambiental que percibían, con una excepción: cuando el volumen en el que se le decía su nombre era igual o menor al del ruido ambiental.


Hasta ahora, muchos entrenadores de perros pensaban que la voz del amo era lo que hacía despertar la atención de los cánidos, pero el estudio demuestra que estos animales son capaces de responder a cualquier llamada, les sea o no familiar, lo que parece indicar que nuestras peludas mascotas estén entendiéndonos mejor de lo que parece.


Fuente National Geography 

jueves, 17 de marzo de 2022

¿Por qué los bulldogs son los perros que más se enferman?

 Es una de las razas de perros más populares, pero también una de la más propensas a padecer diversas enfermedades. Este estudio revela sus dolencias más frecuentes: otitis, diarreas y conjuntivitis, problemas respiratorios y cutáneos.


El perro Bulldog francés, a pesar de su nombre, es una raza de origen británico y francés. La raza fue reconocida por primera vez por The Kennel Club en 1906.


De hocico chato y oscuro, grandes ojos, orejas de murciélago y cuerpo compacto, los perros bulldogs franceses se han puesto de moda y se han convertido en una de las razas de perro preferidas en países como España o Reino Unido. De hecho, en este segundo país, el bulldog francés fue la segunda raza más registrada en el año 2017, solo superada por el labrador retriever.


Sus propietarios se sienten atraídos por su apariencia distintiva; su tamaño se adapta a un estilo de vida sedentario y además existe la percepción de que son buenos compañeros de los niños. Sin embargo, a pesar de su popularidad, la raza de perro tiene algunos problemas de salud bien documentados, especialmente en relación con problemas oculares, respiratorios, cutáneos y de la columna vertebral; y sin embargo, hasta ahora pocos estudios habían analizado su estado de salud.

De este modo, un equipo de científicos del Royal Veterinary College en Reino Unido, estudió los datos veterinarios de 2.228 bulldogs franceses de 304 clínicas diferentes durante 2013, demostrando que estos pequeños perros son susceptibles de sufrir una amplia gama de enfermedades. Los resultados recogidos en el estudio titulado Demography and disorders of the French Bulldog population under primary veterinary care in the UK in 2013 se publicaron en la revista especializada Canine Genetics and Epidemiology.


Según los científicos, los problemas más comunes en los perros bulldogs franceses fueron las infecciones de oído, la diarrea y la conjuntivitis. Además, sus características físicas –hocico chato y cara plana– también pueden incrementar el riesgo de padecer problemas respiratorios -observado en un 12,7% de los perros en este estudio- o de piel.


“Uno de los hallazgos más interesantes de nuestra investigación es que los bulldogs franceses macho parecen menos saludables que las hembras ya que tienen una mayor probabilidad de sufrir 8 de los 26 problemas de salud más comunes”, informa Dan O'Neill, autor principal del trabajo


Más popularidad, más problemas

La investigación destaca también el aumento de la popularidad del bulldog francés y sus consecuencias sobre la raza. Así, en 2003 el 0,02% de los cachorros que nacieron en Inglaterra pertenecían a esta raza, mientras que en 2013 la cifra ascendía hasta el 1,46%. “Es un nivel de crecimiento de población sin precedentes en una sola raza de perro”, indica O’Neill.

Sin embargo, según los investigadores, este incremento en la demanda del bulldog francés puede ser perjudicial para el bienestar de estos perros debido a los riesgos de salud asociados con sus características físicas extremas.

De este modo, los autores advierten además, que el estudio puede incluso subestimar la verdadera cantidad de perros con problemas de salud, ya que los datos pueden incluir animales que requieren mayor atención veterinaria.


Por otra parte, debido a su recientemente popularidad en Reino Unido, la información recopilada era sobre todo de perros jóvenes, y los problemas de salud generalmente se aumentan con la edad, por lo que el estado de salud general de la población de bulldogs, podría -a pesar de las numerosas afecciones a las que estos animales se ven expuestos- haber sido subestimada.


Fuente National Geography 

Dolor en manos y pies: el nuevo síntoma post covid 19

 A casi dos años de declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) la pandemia por COVID-19, los expertos siguen sin encontrar respuesta a algunos de los interrogantes que presenta el virus.


Es que con el transcurrir del tiempo y el devenir de la pandemia, los médicos comenzaron a ver en pacientes que habían atravesado un cuadro de COVID-19 signos y síntomas de lo que luego dieron en llamar COVID prolongado, long COVID o síndrome post COVID. 


Según un artículo publicado en la revista Neurologyalgunos pacientes con COVID prolongado sufren de una forma de daño nervioso persistente que a su vez puede conducir a fatiga, cambios sensoriales y dolor en las manos y en los pies.

Este daño nervioso fue observado incluso en personas que padecieron cuadros leves de la enfermedad, y según los investigadores, no parece estar causado por la infección en sí misma, sino más bien por la reacción inmunitaria (y, concretamente, inflamatoria) que el virus desencadena en el organismo.


“Entre los pacientes evaluados con COVID prolongado, la neuropatía de fibras pequeñas prolongada, a menudo incapacitante, después del SARS-CoV-2 leve fue lo más común, comenzando dentro de un mes del inicio de COVID-19. Diversas pruebas sugirieron que la desregulación inmunitaria desencadenada por infecciones era un mecanismo común”, publicaron los autores entre las conclusiones de su trabajo.

Concretamente, este daño nervioso afecta al sistema nervioso periférico y es específicamente prominente en las células de fibra pequeña.

Los investigadores estudiaron 17 pacientes, de una edad media de 43,3 años y observaron que “la evidencia indirecta vincula al COVID prolongado con la polineuropatía incidente que afecta los axones de fibras pequeñas (sensoriales/autonómicos)”.

Además, tal como explicaron, parece ser una complicación bastante prevalente: de entre los participantes en el estudio (que, por otra parte, tiene la limitación de basarse en una cohorte de pacientes bastante pequeña), un 59% padecía neuropatía compatible con COVID-19.


En general, el hallazgo es consistente con otros tipos de daño nervioso observados en pacientes con COVID, en los que parece que la complicación no está causada tanto por el ataque del virus en sí, sino más bien por una respuesta inmune excesivamente agresiva.

Estudios anteriores daban cuenta de lesiones en los pies, similares a las ocasionadas por los conocidos “sabañones”, y de las que los expertos habían concluido que podrían deberse a que el cuerpo ataca por error el tejido sano. Algo así como una respuesta autoinmune al virus.

Uno de los problemas que plantea este descubrimiento es que se trata de un tipo de daño bastante complicado de tratar. Así, de los pacientes identificados en el trabajo, que fueron tratados con tratamientos inmunoterapéuticos (como inmunoglobulinas o corticoesteroides) sólo un 52% experimentó una mejoría, sin que ninguno lograse la completa remisión de los síntomas.

Es por eso que entre las conclusiones, los autores instaron a las personas que experimenten síntomas neurológicos derivados del COVID -o que hayan aparecido luego de la enfermedad y no tengan otra causa identificable- que consulten con un especialista, ya que es esencial identificar el tipo concreto de neuropatía para poder establecer la alternativa terapéutica más eficaz en cada caso.


Fuente Infobae

miércoles, 16 de marzo de 2022

Descubre cómo hacen los perros para detectar ataques epilépticos

 Los perros son capaces de oler unos determinados compuestos químicos relacionados con las crisis epilépticas. Los investigadores estudian ahora cómo entrenar a estos animales para que identifiquen un ataque antes de que se produzca.


Un olfato extraordinario permite a los perros llegar más allá de lo que cualquier tecnología humana es capaz de conseguir cuando se trata de localizar drogas, explosivos e incluso algunas enfermedades, como determinados tipos de cáncer. Los expertos llevan años entrenando a los cánidos para estos y otros propósitos, como la detección de ataques de epilepsia. Sin embargo, los ensayos realizados hasta la fecha demostraron una efectividad variable, con lo que hasta ahora no se tenían pruebas científicas definitivas.


Un nuevo estudio de la Universidad de Rennes publicado recientemente en Scientific Reports sugiere que los cánidos son capaces de detectar un tipo de olor específico que emitimos los humanos cuando padecemos un ataque epiléptico, una hipótesis que abriría la puerta a ayudar a muchos enfermos. “La mayoría de los perros de asistencia específicamente entrenados para las personas epilépticas asisten a los enfermos una vez se ha producido la crisis”, apunta Jennifer Cattet, doctoranda en psicología y etología animal de la Universidad de Ginebra y coautora del estudio.


En el ensayo los investigadores recogieron muestras de sudor de siete pacientes con distintos tipos de epilepsia mientras realizaban distintas actividades: descansando, haciendo ejercicio o sufriendo un ataque epiléptico, y los introdujeron en siete latas (una por actividad), que mostraban a cinco sabuesos a los que entrenaron para detectar esta enfermedad. Todos ellos pudieron identificar la muestra que correspondía al ataque, sugiriendo la posibilidad de que estos animales sean capaces de detectar un olor específico relacionado con esta enfermedad.


“Todavía no sabemos qué moléculas específicas son capaces de detectar estos animales, ni cuándo ni en qué condiciones aparecen -afirma Cattet- Suponemos que los perros pueden adaptar su sentido del olfato dependiendo del contexto. Por ejemplo, sabemos que son capaces de identificar a los individuos más débiles dentro de un grupo de presas. Con lo que es probable que exista un olor emitido por nuestro cuerpo en determinadas situaciones (como una crisis epiléptica o un episodio de estrés) que pueda ser detectado por los cánidos de un modo innato" apunta Cattet.

Sudor tras un ataque epiléptico

Para ser exactos, los investigadores usaron muestras obtenidas durante el ataque, y no antes, por lo que por el momento no pueden deducir con precisión qué tipo de olores son detectables, ni cuándo se producen. Sin embargo, el estudio abre la posibilidad a nuevas líneas de investigación que desarrollen tecnologías que ayuden a predecir ataques.

"El hecho de hayamos detectado un olor específico permite adiestrar a un mayor número de canes que ayuden a personas aquejadas de epilepsia", afirma Cattet, quien trabaja desde hace años en organizaciones como Medical Mutts, en Estados Unidos, y Handi Chiens, en Francia con un propósito: conseguir que los canes sean capaces de detectar los ataques antes de que se produzcan. Eso sí, no será nada fácil. La investigadora asegura que para su proyecto los perros necesitaron unos tres meses de media.


Fuente National Geography 

¿Qué debes hacer si tu gato maúlla por las mañanas?

Cualquiera que tenga un gato se habrá quedado fascinado alguna vez con los diferentes sonidos que emiten nuestros compañeros. Sin embargo, el desconocimiento general que existe en torno a los felinos hace que en ocasiones no sepamos identificar las causas de esos sonidos o que incluso intentemos “traducirlos” al lenguaje humano.



Los maullidos de los gatos muy insistentes, sobre todo si son nocturnos, se convierten en una de las principales preocupaciones entre los pet parents. No porque sean molestos, sino porque muchas veces éstos no logran saber qué les ocurre ni tampoco saben cómo calmarlos, lo que acaba provocando un problema de convivencia entre ellos.


Tal y como explicamos en este artículo, debemos no solo fijarnos en el tipo de sonido que emiten nuestros gatos, sino también en su comportamiento, ya nos dará las pistas para saber qué puede ocurrirles. Debemos buscar la causa del problema, qué les pasa y por qué maúllan… Solo así podremos ayudarlos y dejarán de maullar.

Hoy, la experta en conducta felina Laia Salvador responde a las dudas de nuestros lectores preocupados por el maullido de sus mininos y da las claves para mejorar su relación: paciencia, calma y coherencia.


Muchos pets parents cuentan que sus gatos maúllan en mitad de la noche y no saben qué hacer para ayudarlos...

¿Por qué lo hacen? ¿Cuál es la solución?


Son las cinco de la mañana y, en mitad de un placentero sueño, te despiertan los maullidos de tu gato. ¿Le pasará algo? Entre bostezos te levantas para comprobar qué necesita, sin ser consciente de que, probablemente, estás cometiendo un error.


Lo primero, es muy importante descartar que la causa del maullido insistente de nuestro compañero no sea síntoma de alguna molestia o enfermedad. Una vez hayamos visitado a nuestro veterinario de confianza para comprobar que no se debe a ninguna causa orgánica, entonces podemos estar hablando de un problema de comportamiento.


Antes de intentar corregir la conducta de nuestros felinos, debemos entender que son animales nocturnos por naturaleza. Si no han realizado el suficiente ejercicio durante el día, por la noche tenderán a activarse. Por tanto, necesitarán que durante el día cubramos sus necesidades cazadoras y exploradoras y les proporcionemos rutinas diarias de ejercicio físico y mental (sobre todo este último, que será el que realmente les canse).


Si cada vez que nuestro gato maúlla, automáticamente le seguimos por toda la casa hasta el comedero y se lo llenamos a rebosar, nuestro minino estará aprendiendo que cada vez que maúlle le vamos a dar de comer. Lo mismo ocurre si nos ponemos a jugar con él o a darle mimos como respuesta a sus maullidos: al final nuestro gato acabará adiestrándonos a nosotros.


Entonces, ¿debo enfadarme y echarle la bronca cuando se ponga a maullar?

No, no debemos reñirlos. Antes de corregir, debemos enseñar. Si le echamos la bronca a nuestro gato, es muy probable que no entienda la corrección y, además, lo único que consigamos sea confirmar esa conducta del maullido.

Debemos hacer entender a nuestro compañero que no podemos estar a su disposición las 24 horas del día, que hay momentos de juego y también momentos de descanso, y que tiene que respetarlos. ¿Cómo lo haremos? Siempre desde la calma y la coherencia, sin reforzar su conducta.


Fuente La Vanguardia

lunes, 14 de marzo de 2022

La pandemia aumentó la tendencia de tics nerviosos en los adolescentes

 Un estudio reciente sobre adolescentes y preadolescentes encontró una asociación entre el tiempo que pasan en las redes sociales y la gravedad de los tics, según los resultados preliminares publicados hace algunos días.


Los tics son sonidos o movimientos compulsivos, a menudo repetitivos, que generalmente comienzan en la infancia. En algunos casos, pueden dar como resultado un diagnóstico de un trastorno de tic crónico, como el síndrome de Tourette.

Los tics pueden variar desde contracciones de la cabeza hasta gruñidos y chasquidos, o más raramente casos de arrebatos inapropiados u obscenos.

Una ola repentina de nuevos casos de tics en adolescentes desde el comienzo de la pandemia ha desconcertado a los científicos de todo el mundo, lo que ha dado lugar a artículos e investigaciones en revistas médicas. El último esfuerzo para comprender la creciente prevalencia de los tics buscó respuestas en las redes sociales.

“Dados los aumentos conocidos en el uso de las redes sociales durante la pandemia, así como el aumento paralelo de los trastornos de tics que hemos visto en nuestra clínica, investigamos si había alguna correlación entre el uso de las redes sociales y los síntomas de los tics”, dijo la autora del estudio, Jessica Frey, especialista en trastornos del movimiento de la Universidad de Florida, en un comunicado de prensa.


En el estudio, 20 adultos jóvenes de entre 11 y 21 años completaron una encuesta sobre el tiempo que pasan en las redes sociales, la frecuencia y gravedad de los tics y la calidad de vida en general. La gran mayoría (90%) de los participantes dijo que usó más las redes sociales durante la pandemia de COVID-19, el 85% indicó que sus tics también se volvieron más frecuentes durante ese tiempo.

La mitad de los adolescentes encuestados aseguró que las redes sociales habían tenido un impacto negativo en sus tics, según el comunicado de prensa. Los investigadores informaron un vínculo significativo entre una mayor gravedad de los tics, un mayor uso de las redes sociales y una calidad de vida reducida; sin embargo, no encontraron un vínculo entre el uso de las redes sociales y la frecuencia de los tics.

“Nuestros resultados han comenzado a arrojar luz sobre el impacto que la pandemia de COVID-19 y el mayor uso de las redes sociales pueden tener en los adolescentes y adultos jóvenes con trastornos de tics”subrayó Frey. “Se necesita más investigación para identificar mejor los factores estresantes exactos que conducen a tics más graves para que podamos trabajar para reducir los factores estresantes para quienes los experimentan”.

Los resultados del estudio se presentarán en la reunión anual de la Academia Estadounidense de Neurología en abril. Mientras tanto, los investigadores planean inscribir a 60 participantes más y explorar más la asociación. Si bien no existe un esfuerzo a gran escala para rastrear los casos de tics a nivel nacional, los especialistas en los Estados Unidos han informado tendencias similares: una afluencia de nuevos pacientes con tics, muchos de ellos niñas adolescentes.

Los trastornos de tics crónicos como el de síndrome Tourette afectan principalmente a los niños, y muchos de esos niños comienzan a mostrar síntomas a los 6 o 7 años, según Mayo Clinic.


Un artículo del diario Wall Street Journal publicado en octubre describió la afluencia de nuevos pacientes con tics, principalmente mujeres adolescentes, en todo el país, desde el Texas Children’s Hospital hasta el Rush University Medical Center en Chicago. Casi al mismo tiempo, investigadores del Reino Unido publicaron un informe que detallaba un aumento de niñas adolescentes que mostraban tics “complejos y extraños”.

Como muchas de las chicas informaron que usaban TikTok, los investigadores consideraron cómo las redes sociales podrían impulsar una tendencia tan inusual y de gran alcance. Algunos de los nuevos pacientes dijeron que pasaron tiempo viendo videos de personas influyentes que informaron tener síndrome de Tourette u otros trastornos de tics, informó WSJ.

Pero el costo mental de la pandemia no puede subestimarse. Las personas con trastornos de tics a menudo manejan otras afecciones de salud mental, como ansiedad, depresión y trastorno obsesivo-compulsivo, según la Sociedad Internacional de Parkinson y Trastornos del Movimiento. Los expertos también han señalado una prevalencia creciente de ansiedad y depresión en niños y adolescentes durante la pandemia, lo que podría ser otro factor determinante.

La pandemia de COVID-19 le ha pasado una enorme factura a la salud mental, indicó este miércoles la Organización Mundial de la Salud, destacando que los casos de ansiedad y depresión han aumentado en más del 25% a nivel global. En un nuevo informe científico, la OMS también señala que la crisis de coronavirus impidió de manera significativa el acceso a los servicios de salud mental en muchos casos, generando inquietud por el aumento de los comportamientos suicidas.

Este informe, apoyado en el análisis y compendio de gran cantidad de estudios, determinó que en el mundo se registró un aumento del 27,6% de los casos de trastorno depresivo grave solamente en 2020. Durante el primer año de pandemia también se pudo constatar un 25,6% más de casos de trastornos de ansiedad a nivel mundial. “En términos de proporciones, se trata de un gran aumento”, advirtió Brandon Gray, del Departamento de salud mental y toxicomanías de la OMS, quien coordinó dicho informe científico. El trabajo “demuestra que el COVID-19 ha tenido un fuerte impacto en la salud mental y bienestar de las personas”.


Fuente Infobae

Descubre como la domesticación moldeo el cerebro de los perros

  Un nueva investigación basada en el estudio de 33 razas de perro ha concluido que la domesticación afectó significativamente a la forma d...